El Coaching es un proceso que sucede entre dos personas. Una es el mentor y la otra es quien quiere llegar al conocimiento de cierta realidad. El primero trata de que el segundo llegue a su objetivo no mediante clases magistrales, sino por medio de la mayéutica (término griego que significa dar luz).
Se trata de ir planteando
preguntas que vayan abriendo los horizontes e ir descubriendo la realidad de
forma autónoma. El Coachee tiene
todas las respuestas, el Coach tiene
todas preguntas, esta es la esencia.
Los pilares sobre los que se
apoya esta visión son los siguientes:
- Cada uno tiene los
recursos necesarios o puede adquirirlos.
- En cualquier situación,
cada uno toma la mejor opción posible.
- El comportamiento
humano está dotado de propósito.
¿Tiene sentido un docente-Coach? ¿Qué aporta el Coaching a la educación?
El Coaching educativo es aquel que tomando como punto de referencia el
proceso educativo, está dirigido a todos los agentes implicados en dicho
proceso: alumnos, familia y docentes. Como en toda organización, implícitamente
se da la relación directivo-empleado, pero en este caso nos interesa
especialmente los binomios docente-familia y docente-alumno.
Pero, ¿qué competencias debe desarrollar un profesor-Coach?
- Facilitar la integración de los alumnos en su grupo (clase), y en el conjunto de la dinámica escolar.
- Contribuir a la personalización de los procesos de enseñanza y aprendizaje.
- Efectuar un seguimiento global de los procesos de aprendizaje de los alumnos, detectando las dificultades y necesidades específicas, con objeto de articular las respuestas educativas adecuadas.
- Coordinar el proceso evaluador de los alumnos y asesorar respecto a su promoción de ciclo.
- Favorecer los procesos de maduración vocacional, en conexión con la orientación educativa y profesional de los alumnos.
- Fomentar el desarrollo de actitudes participativas dentro del grupo de alumnos, tanto para con el centro educativo como respecto a su entorno natural y socio cultural.